Introducción Las pacientes obstétricas forman parte de un pequeño pero significativo número de admisiones a la terapia intensiva. En el embarazo ocurren múltiples cambios en la fisiología, incluyendo alteraciones en el volumen sanguíneo, gasto cardíaco, respiración, función endocrina y niveles sanguíneos de los factores de coagulación y proteínas antitrombóticas. Estos cambios causan estrés sobre la reserva fisiológica normal del cuerpo humano y limitan la actividad del organismo de la mujer embarazada, para compensar las alteraciones ocurridas después de una enfermedad aguda, resultando con frecuencia en disfunción orgánica severa. Además, existen alteraciones peculiares del embarazo incluyendo la preeclampsia, el desprendimiento prematuro de placenta, la embolia de líquido amniótico y la hemorragia posparto, todas las cuales pueden producir una disfunción orgánica que amenace la vida y cause un incremento en la mortalidad materna. Como el proceso fisiológico del embarazo en las mujeres jóvenes sanas se puede complicar por alteraciones potencialmente fatales, en aproximadamente 1 a 9 x 1,000 embarazos, el sistema de salud en la mayoría de los países se concentra en revisiones prenatales regulares para detectar complicaciones en una etapa temprana.
2008-05-01 | 5,615 visitas | 3 valoraciones
Vol. 15 Núm.93. Enero-Febrero 2008 Pags. 5-15 GINECO 2008; 15(93)