Cuando Freud comienza su desarrollo teórico en la experiencia clínica con pacientes neuróticos, se encuentra con situaciones estructuradas que ponen de manifiesto el descubrimiento de fenómenos psíquicos muy complejos desde donde Freud construye su teoría de lo inconsciente. A través del discurso de los pacientes, se hacían evidentes recuerdos que de alguna manera se asociaban al desarrollo de síntomas, mostrando un trazo, una huella, una tendencia característica de la historia del sujeto. El psicoanálisis nace durante la experiencia clínica y su desarrollo avanza con cada experiencia en cada caso en particular. El estudio de lo inconsciente estaba en furor en Paris por aquella época, en el hospital de Viena, la Salpêtrière, Jean-Martín Charcot estudiaba fenómenos psíquicos inconscientes a través de la hipnosis. Este descubrimiento es crucial en la historia del Psicoanálisis. Recuerdos olvidados que al recordarlos y re-significarlos producían alivio en las dolencias de los pacientes y cambios estructurales en su manera de relacionarse con el otro y consigo mismo, condujo a Sigmund Freud, un hombre culto, estudioso, lector asiduo, al desarrollo de la teoría de lo inconsciente desde donde se estructura la Psicoanalice. Lo que la tragedia de Sófocles permite a Freud, es la posibilidad de avanzar a través de un complejo campo de relaciones dentro de la organización dinámica de las relaciones dentro de la constelación familiar, que es al mismo tiempo la primera estructura social desde donde se transmiten los valores culturales. De acuerdo con Jaques Lacan, “todo el desarrollo del psicoanálisis consistió en la valorización sucesiva de cada una de las tensiones implicadas en ese sistema triangular”. Lo que El Edipo de Sófocles nos muestra es precisamente el campo que hace a la represión. Edipo intenta escapar de la predicción que le asegura un destino poco alentador junto a sus padres. Matar al padre para desposar a la madre.
2011-07-13 | 663 visitas | 2 valoraciones
Vol. 1 Núm.3. Octubre 2010 Pags. 11-18 Rev. Psicol. GEPU 2010; 1(3)